Créase o no

Faltaban 7 minutos de partido; futbolísticamente parecía definido, aunque aquellos amantes del deporte saben que ningún encuentro se termina hasta el pitazo final.
El comienzo se anunció a las 19.15, pero inició recién a las 20.30, dado que la niebla que sigue cubriendo la Ciudad de Buenos Aires por éstos días, impedía la correcta visual de parte de los árbitros para realizar su tarea en forma adecuada.
Imaginen las modificaciones de último momento en la transmisión televisiva; y las sucesivas recepciones en toda América que debieron cambiar su programación, o por lo menos dilatarla.
Pero el 3 a 0 lo decía todo...iban 37 minutos del segundo tiempo; “ya se viene Son de Fierro” anunciaba con algarabía el relator...una y otra vez; claro, estamos hablando de un rating de 37.7 que sería heredado, aunque sea en parte, por la novela del canal del sol.
El problema era que al comienzo del segundo tiempo, a la niebla se le ocurrió descender, y el árbitro interrumpió el match por 6 minutos, según indicaron con muy poca cautela los periodistas que están en el campo de juego; y al poco tiempo, una vez reanudado el partido, la hinchada Xeneize cubrió de humo media cancha, producto de las bengalas que fueron ingresadas ilegalmente al estadio; y el estimado Morel Rodríguez que sin saber de programación televisiva ni época de elecciones (se ve que no votó en la Ciudad), cayó lesionado por unos minutos.
Ni siquiera tengamos en cuenta los cambios que se hicieron, que como saben, la FIFA aconseja a los árbitros adicionar 30 segundos por cambio realizado.
“Ya viene Son de Fierro” repitió el relator con ansiedad, mientras Mauricio se comía las uñas por temor a que los colombianos repitan su costumbre de anotar goles sobre la hora.
Fue uno de esos momentos que uno no debe olvidar, porque no es sólo un partido de fútbol, sino que el respeto debe verse reflejado en todos los ámbitos de nuestra vida. “A partir de éste momento, se adicionan 10 minutos”, anunció Tití, por lo visto, gran seguidor de Son de Fierro...o también sabía de la costumbre colombiana de marcar sobre la hora.
Y así fue, que ante mi impotencia, el árbitro adicionó 10 minutos a partir de los 38 del segundo tiempo; por lo tanto el partido terminó a los 48. ¿Hace falta aclarar más? A sí, el partido revancha por la final de la Copa Libertadores se juega el 20 de junio, y el ballotage es el 24, ¿quién ganará?

Pd.: Son de Fierro hizo 25.9